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Las finanzas de Barcelona pueden ser la serie de cuentas bancarias más comentada en el mundo este verano.
La asombrosa deuda de 1.300 millones de euros que tiene el club ha confundido a muchos sobre por qué pueden gastar sumas tan grandes este verano. Actualmente esa cifra es de 153 millones de euros. Esto se debe en gran medida a la venta de activos futuros y al refinanciamiento de su deuda a corto y largo plazo.
Según Sport, el club espera aportar 1.300 millones de euros a este ciclo económico. Una cantidad considerable, de los cuales 500 millones de euros, proviene de la venta de los derechos de TV y Barça Studios. Los otros 267 millones de euros generados por la venta de derechos televisivos se incluyeron en el último ciclo económico.
Esto se compara con los gastos de 900 millones de euros este año, de los cuales 620 millones de euros provienen de salarios. Debería dejarles un beneficio de 400 millones de euros, que el club pretende utilizar para amortizar su déficit de 350 millones de euros. Esto les volvería a poner en negro, por 50 millones de euros, a pesar de la deuda.
En teoría, todo esto debería igualar la capacidad del Barcelona para registrar todos los nuevos fichajes, pero los blaugrana están esperando una respuesta de La Liga para ver si sus calificaciones coinciden. En caso de discrepancia, Diario AS indica que se activaría una cuarta palanca económica. La venta de otro 24,5% de Barca Studios por 100 millones de euros les permitiría registrar esas compras.
Aunque es difícil para el profano interpretar el verdadero significado de estos números y sus consecuencias, destaca que sin la venta de activos, el Barcelona estaría perdido esta temporada. Gran parte de la culpa de su desesperación financiera se puede atribuir a los hombros del expresidente Josep Maria Bartomeu, pero si los puntajes no cuadran la próxima temporada, el titular Joan Laporta podría cuestionarse.
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